Pese a todas sus diferencias, las sociedades de Estados Unidos y México tienen más puntos de contacto que los que quisieran aceptar.

Para muestra basta un botón: Luigi Mangione, el joven que asesinó a Brian Moore, el presidente y director general de la empresa UnitedHealthCare, una compañía de seguros médicos, la madrugada del 4 de diciembre en Nueva York, cuando el ejecutivo salía de su hotel.

De hecho, si Mangione fuera mexicanoprobablemente alguien pensaría ya en un corrido en su honor. Joven y bien parecido, Mangione mató al dirigente de una gran empresa que como otras de su industria, se distingue por ofrecer seguros médicos pero también por regatear todo lo que puede, y más si es posible, por los gastos de sus asegurados.

En Estados Unidos Mangione parece haberse convertido en un héroe folklórico, a la John Dillinger o Bonnie and Clyde, los asaltabancos de los años veintes, o los contrabandistas de alcohol en la era de la Prohibición, que en el marco de vidas delictivas desafiaban al poder y en alguna medida se convirtieron en figuras contestatarias.

Es en alguna medida lo que pasa con muchas de las figuras reflejadas en los corridos mexicanos -y por cierto, hay también corridos en territorio estadounidense-. No es de esperar que Mangione acabe como figura en un corrido pero tampoco es tan descabellado como parece.

De acuerdo con todos los indicios, al margen de motivos personales, la información alrededor de Mangione presentó su crimen como uno de ajusticiamiento.

De acuerdo con la policía de Nueva York, en la munición encontrada en el lugar de los hechos había escritas palabras: dos casquillos de bala tenían las palabras "negar" y "deponer", y una bala encontrada tenía la palabra "demorar", según la oficina. Un manifiesto en poder de Mangione criticaba a la industria de la atención sanitaria en general en Estados Unidos y, en concreto, a UnitedHealthcare, como "parásitos".

El asesinato de Thompson y las acusaciones contra Mangione han mostrado que hay un debate y una profunda molestia respecto a la industria de los seguros sanitarios y el sistema de atención sanitaria en Estados Unidos.

De hecho, muchas publicaciones en redes sociales expresaban apoyo al pistolero y por tanto un fuerte sentimiento de insatisfacción con el sistema de seguros médicos de los EU. De acuerdo con la encuestadora Gallup, menos de una tercera parte de los estadounidenses tiene buena impresión de esas organizaciones en general, aunque se consideran bien atendidos por la compañía que tienen contratada.

Pero también es cierto que de creer a los historiadores, no es la primera vez que un acto delictivo subraya un profundo resentimiento social y en ese sentido, Mangione bien podría ser visto como un "vengador" de los indefensos clientes de las empresas de salud y convertirse en un héroe para parte de la población aunque se le acuse de asesinato o terrorismo. En otras palabras, un héroe de corrido.

POR JOSÉ CARREÑO FIGUERAS  

COLABORADOR   

JOSE.CARRENO@ELHERALDODEMEXICO.COM                                   

@CARRENOJOSE