Hoy, hace 45 años, los diarios llevaban en sus primeras planas: MURIO GONZALO N. SANTOS. Gobernaba en SLP Guillermo Fonseca Álvarez, en una época donde el navismo tenía mucha presencia, por lo cual, Fonseca, prefirió en vez de hacerle el homenaje de cuerpo presente como exgobernador en el Palacio de Gobierno, hacer el reconocimiento en el municipio de Tamuín, en dónde se sumó la SecretarÍa de la Defensa Nacional, a despedir al también General de División. Hoy, se abren las puertas del Palacio de Gobierno, dónde siempre las tuvo abiertas el exgobernador Teófilo Torres Corzo. Teófilo, el gobernador que tuvo la inteligencia, paciencia y habilidad, para escuchar a los adversarios, sin perder el objetivo de gobernar para las mayorías. Él, en el poco tiempo que duró su gobierno, pudo imponer su huella como estadista y ser el generador del primer organismo electoral ciudadano en el país, integrado por potosinos destacados, honorables y con gran prestigio, que trabajaron profesionalmente sin cobrar un solo centavo, lo cual les dio independencia y libertad en su actuación.  Supo Teófilo Torres Corzo ser gobernador y trascender, asumió el papel de líder y consensar con políticos, empresarios, iglesia, sindicatos, universitarios y medios de comunicación. El resultado quedó plasmado, logró la tranquilidad y recobrar la paz en SLP. Hombres como él, hacen mucha falta en el Estado. ¿A quién le daremos los potosinos la estafeta, que tenga esa capacidad de convocatoria? Que en paz descansen Gonzalo N. Santos y Teófilo Torres Corzo, a mi solo me queda decir: Misión Cumplida. Gracias. Es cuánto. Fabián Espinosa Díaz de León