En México, 7 de cada 10 madres solteras no reciben pensión alimenticia y 3 de cada 4 hijos de padres separados tampoco, además, una de cada diez mujeres que demanda la pensión a su expareja la consigue, “No podemos seguir premiando a quienes abandonan sus responsabilidades”, se lamentó la senadora Geovanna Bañuelos. Al fundamentar a favor del dictamen por el que se aprobaron diversas reformas a la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, en materia de pensión alimenticia, la coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo celebró que con esta reforma se avanza en la protección y garantía de este derecho. Geovanna Bañuelos lamentó que a pesar de que en la actualidad existen diversas normas que buscan garantizar su cumplimiento, en la realidad no se ha logrado de manera integral, con lo cual se deja desprotegido a uno de los sectores poblacionales más vulnerables del país: “Nuestros niños”. Por lo que la senadora zacatecana resaltó que con esta reforma se crea el Registro Nacional de Obligaciones Alimentarias, con el objetivo de concentrar la información de deudores y acreedores de obligaciones alimentarias, a fin de dar efectiva protección y restitución de los derechos de niñas, niños y adolescentes. Y se establece el certificado de no deudor alimentario como requisito para la obtención de licencias, pasaportes o documento de identidad; para participar como candidato a cargos concejiles y de elección popular; para participar como aspirante a cargos de jueces, magistrados en el ámbito local o federal; los que se realicen ante notario público y en las solicitudes de matrimonio. “Qué bueno que estamos hablando en el Senado de la República, de pensiones alimenticias. Qué bueno que estamos hablando sobre la creación de un registro nacional de deudores alimenticios. Porque si no existiera ese nivel de irresponsabilidad en algunos hombres, no tendríamos necesidad de estar legislando al respecto”, mencionó la legisladora. Finalmente, Geovanna Bañuelos recordó que en el caso específico de las niñas, los niños y adolescentes, el acceso a los alimentos es un derecho que incluye otorgar lo necesario para que estos continúen sus estudios y sano esparcimiento para su desarrollo. “De tal suerte que el tema de pensiones alimenticias reviste crucial importancia, pues sin ella se deja en desamparo a la niñez, a nuestra niñez”, concluyó.