Vínculo copiado
#ESNOTICIA
#ESNOTICIA
El cuento repetido desde hace tiempo por altavoces de la 4T de que el empresario “no quiere pagar”, se desmorona
00:10 martes 28 octubre, 2025
Colaboradores
Desde su festejo de cumpleaños el sábado pasado por la noche, Ricardo Salinas Pliego, presidente de Grupo Salinas, envió un mensaje directo a la presidenta Claudia Sheinbaum: “que nos diga el SAT cuánto hay que pagar para poder liquidarlo en menos de 10 días”.
“El gobierno tiene cosas más importantes que hacer que andar persiguiendo a un empresario”, remató. Claro y contundente. La pelota está en la cancha de la presidenta y su gobierno. El empresario acompañó esas palabras de un par de documentos que, tras tanto golpeteo desde el poder, decidió hacer públicos: una respetuosa carta enviada hace un año a Sheinbaum, donde le explica el origen del litigio, el incumplimiento del gobierno de AMLO de un acuerdo ya pactado entre la administración federal anterior y Grupo Salinas, y una nueva misiva al SAT, donde pide se le indique cuánto hay que pagar para liquidarlo “en menos de 10 días”.
El cuento repetido desde hace tiempo por altavoces de la 4T de que el empresario “no quiere pagar”, se desmorona. López Obrador engañó y construyó una narrativa que desviaba la atención de las crisis y los problemas reales del país. Salinas Pliego no solo ha estado siempre dispuesto a pagar lo justo y correcto, sino que ya había un acuerdo para que así lo hiciera. Y la cantidad del adeudo que reclama el SAT no supera los 10 mil millones de pesos; número muy lejano a los más de 70 mil millones que se repite en redes por parte de las granjas y propagandistas del régimen.
Si el gobierno realmente quiere cobrar, es muy simple. El empresario está listo para pagar este mismo mes. ¿Qué hará el gobierno de la presidenta Sheinbaum?
Si se desbarata la mentira del mega adeudo que no se quiere cubrir; ha quedado expuesto que López Obrador y su gobierno faltaron a la palabra; y por tanto Salinas Pliego liquida lo que sería estrictamente legal, ¿qué argumento habría ahora para continuar en el golpeteo contra él, sus empresas y colaboradores?
¿De dónde se agarrará el ala dura de la 4T para seguir en la confrontación e intentar silenciar a una voz que se ha convertido en incómoda y crítica del régimen?
Las cartas están sobre la mesa. Toca el turno al gobierno de Sheinbaum responder. El litigio no comenzó en su sexenio, ni siquiera es un pleito contra ella. La presidenta puede escapar y librarse de un asunto que no tiene por qué cargar. Heredó una situación que hoy mismo podría resolver. La cosa es si le interesa y si tiene margen para hacerlo, porque a los duros de la 4T ni les conviene ni les importa que se ponga fin a una batalla que López Obrador y los suyos alimentaron… y que les ha resultado muy lucrativa.
Aclaración necesaria y de interés: colaboro en Grupo Salinas.
POR MANUEL LÓPEZ SAN MARTÍN
COLABORADOR
@MLOPEZSANMARTIN