Abrió fuego el doctor Monreal. No es solo que se le viera ahí, en el estrado, una fidedigna alegría por el triunfo de su compañera. Es que supo manifestarlo El doctor Patán siguió de manera atenta el proceso que llevó a Claudia Scheinbaum hasta la antesala de la presidencia. El motivo, al margen de mi preocupación obsesiva por el bienestar del pueblo, pueden imaginárselo: mi aspiración presidencial para 2030 sigue viva, y hay que aprender de los mejores. En todo caso, me llevé de ese ejercicio democrático un regalo inesperado: el del lenguaje, que es aquello de lo que están hechos la política y los sueños. Sí. Todo fue resultar ungida Claudia y multiplicarse las bellísimas manifestaciones de apoyo y celebración en las redes. No sabía que mis compañeros de militancia tenían esa vena poética.          Abrió fuego el doctor Monreal. No es solo que se le viera ahí, en el estrado, una fidedigna alegría por el triunfo de su compañera. Es que supo manifestarlo. Así que apeló a su formación cervantina, “deshacer agravios y enderezar entuertos”, así dijo, para rematar con “Yo quiero decirle a Claudia Scheinbaum que cuente conmigo”. Bien por ese gesto de unidad.          Claro que el premio “Mesa que más aplauda” –creo que el nombre refleja el ambiente festivo de la noche– tenía que estar competido. No había terminado la unción y ya circulaba por ahí un tuit, o sea un X, de Ale Frausto. “El pueblo nunca se equivoca y eligió a una mujer extraordinaria e íntegra para continuar con la Cuarta Transformación y consolidar el legado de nuestro Presidente @lopezobrador_ . Felicidades querida @Claudiashein”, dejó caer la secretaria de Cultura, y remató con una especie de cartel soviético en el que Claudia, bandera en mano, dirige a las masas a la victoria. Ojalá que el gesto sirva para darle continuidad en el cargo. El pueblo ya probó las mieles de las pasarelas con huipiles. No le robemos eso.

         “No, pues ya se llevó el premio la Alejandra”, dirán. Nada más lejos de la realidad. Si Ale se puso en plan “Proletarios del mundo, uníos”, Pepe Merino se puso francamente norcoreano: “Claudia es un faro, una guía hacia lo importante, lo justo y lo correcto. Se ensancha el futuro de la izquierda bajo su liderazgo”. A ver, maten eso. Bien, PP. #Ivermectina2024.          Hubo más. Gatell, con todo y que aquí en la ciudad no le hicieron caso con su onda cubano-anti vaxer, hasta “querideó” a la elegida: “¡Felicidades, querida Dra. @Claudiashein! Indudablemente el pueblo de México es sabio y eligió correctamente a quien guiará la defensa y avance de la transformación”. Incluso Pati Armendáriz hizo sus aportaciones: “Una mujer excepcional será nuestra presidenta de México, @Claudiashein y con ella México consolidará un futuro brillante con la gran continuidad de la cuarta transformación. ¡Nos congratulemos!”, dijo, con una sinapsis heterogénea que supongo que se debió a la emoción.          En fin, el movimiento transpira dignidad. El doctor se suma a los festejos. #LaCuartaSigue. POR JULIO PATÁN

COLABORADOR

@JULIOPATAN09