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SECTUR: Los nombramientos no los firma el Espíritu Santo
00:03 miércoles 3 julio, 2024
Colaboradores
No fue la primera baja del gabinete estatal. Tampoco será la última. No fue la primera vez que se los dijo, ni se los mandó decir o se los dio a entender. Y tampoco serán las últimas palabras. La salida de Juan Carlos Machinena de la Secretaría de Turismo se suma a los cambios de titular en otros escritorios que, desde 2021, se han visto en este sexenio: Finanzas, Seguridad, Cultura o Turismo. Y esta última va para su quinto nombre. Desde que el Gobernador Ricardo Gallardo tomó posesión del cargo, giró instrucciones precisas a varias dependencias y no solo las que por ley y responsabilidad social y política deben de cumplir. Ejemplo: las reubicaciones de algunas secretarías junto con sus titulares a municipios al interior del estado para, dijo el Ejecutivo al iniciar su mandato, mejor despacho de sus funciones (a la fecha ninguna ha salido de la zona metropolitana, tampoco que desde Palacio de Gobierno se quejen de algo que no han concretado para otras oficinas. Tampoco). Pero el caso de la SECTUR en SLP es algo llamativo y preocupante. Es punto y aparte. Lo dijimos ayer: van 4 titulares -sin contar al sexenio pasado- y “nadie da pie con bola”. ¡Ni los ungidos y ni los gobernadores! Así de fácil, así de sencillo. Las cosas como son.
Hoy el Poder Ejecutivo “se rasga las vestiduras” -en voz de su Secretario de Gobierno- y señala -claro, faltaba más- al hoy ex secretario Juan Carlos Machinena, similar a como lo hicieron con los tres anteriores: la razón de su salida fue “darle funcionalidad a la secretaría. Hubo quejas y el gobernador (Gallardo) lo ha dicho “quien no funcione se va. ¡Quien sea!” Sí es una entidad (SECTUR) que había estado con poco rendimiento y además no se atendieron indicaciones como estar de manera presencial en la sede (Ciudad Valles). Simplemente no quieren hacer la labor y busquemos quién sí quiere…” Y el sector turístico, todas y todos los que dependen de esta “industria sin chimeneas, lo agradece, aplaude y reconoce. Pero en cuanto a resultados, ¿uno en el sexenio anterior y cuatro en lo que van de este gobierno? Ya no es normal, ya no da risa. Ya el Ejecutivo no debe verlo como “castigo revanchista” y menos acomodos “politiqueros” de “haber a quién nombramos mañana para que no esté solo”. Si en quienes han ocupado Turismo estatal -uno con Juan Manuel Carreras y los cuatro que van con Gallardo- no se vieron los resultados, entonces la culpa tampoco es de a quién nombraron. Un cambio o dos en seis años se valen. Entendiendo que se eligió por capacidades y experiencia y que estas se agotaron. Pero, ¿cuatro en tres años? Los nombramientos no los firma el Espíritu Santo.