El que desde hace más de un mes 15 criaturas se encuentren esperando turnos y camilla para una cirugía en los hospitales del IMSS en SLP no debe ser cosa menor. Si bien es cierto, que la anterior delegada, Angélica Rodríguez, ya fue destituida, también es cierto que el problema gravísimo en que viven los hospitales públicos en México es cosa de ella o de otros delegados incompetentes en todo el país. Se trata de algo que México viene arrastrando desde hace años. Pero más que con el anterior gobierno, también hay que decirlo. Cuando el gobierno lopezobradorista decidió prometer un servicio médico mejor que el de Dinamarca, se olvidó de la verdadera problemática en que vivía su país. Cuando decidió cegarse de la realidad y borrar de un plumazo la política médica bien engrasada de Felipe Calderón por el rencor electoral, esto se vino abajo. Hoy corresponde a las actuales administraciones estatal y federal rescatar lo que quede, no solamente de la urgencia clínica de 15 niños que esperan su operación, sino rescatar el sistema hospitalario de todo el estado. En donde el problema no será programar a estos 15 niños u otros cientos de ciudadanos que requieren atención médica de primer nivel, sino saber y ver con qué los van a operar.