Un par de perros “mojados” cruzaron el puente internacional Reynosa-Hidalgo, ante la mirada atónita de los agentes estadounidenses. Los dos caminaron libremente “en contra” por donde regresan los automovilistas en su regreso a Reynosa, pues no utilizaron la caseta como los miles de mexicanos lo hacen cuando lo hacen caminando diariamente, no sin antes mostrar su visa en la mitad del camino, donde se encuentra la caseta de los agentes. Los sábados y domingos antes de las 7:00 horas es cuando el flujo de vehículos disminuye de regreso, porque los aglomeramientos ocurren en el puente de ida hacia Hidalgo, con los paisanos y visitantes que buscan ingresar a la frontera texana para ir de compras o visitar a sus familiares. -- HoraCero