Después de un viaje a Marruecos, un ciudadano británico falleció por contagio de rabia, después de ser mordido por un gato infectado.  La Agencia de Salud de Inglaterra no detalló el nombre de la persona, aunque aseguró que no existe mayor riesgo de contagio. Los funcionarios de salud han estado en contacto con las personas cercanas al fallecido, y ofrecieron vacunas contra la enfermedad, de ser necesario.  Los síntomas de rabia típicamente toman de dos a tres meses en aparecer, pero se pueden materializar en una semana. "En este caso tan trágico, la persona no obtuvo la vacuna a tiempo", aseguró Jimmy Winthworth, profesor internacional de salud pública en la Facultad de Higiene y Medicina Tropical de Londres, reportó The Guardian.  Este es el sexto caso de una persona con rabia en el Reino Unido desde el año 2000. El último fue en 2012, cuando una mujer de 50 años murió en Londres después de ser mordida por un perro en el sur de Asia. Ella fue regresada a su casa por dos doctores antes de ser diagnosticada.  -- Radio Fórmula