El precio de un boleto de avión puede variar mucho en función de infinidad de factores, eso lo sabemos todos. Pero, ¿qué factores afectan al costo de los boletos de avión y por qué a veces los precios cambian de un día (u hora) para otro? Tarifas, servicios, impuestos, oferta, demanda, etc. De todo eso y mucho más vamos a hablar con detalle para que, de una vez por todas, entiendas cómo se calcula el precio de un boleto de avión Parte fija del precio de un boleto de avión Empecemos por el principio: Todos los boletos de avión están compuestos por diferentes elementos y estos se agrupan en dos partes: la parte fija y la parte variable. La parte fija del precio de un boleto de avión tiene en cuenta parámetros como los gastos de realización de ese vuelo (avión, tripulación, combustible, etc.) y los servicios que se ofrezcan a bordo a los pasajeros (como comida y bebida en el caso de que estén incluidos por defecto). La parte fija del precio del boleto de avión no varía con el tiempo, se mantiene siempre estable. Da igual que compres el vuelo con mucha o con poca antelación. Parte variable Esta parte variable del precio de un boleto de avión es la que sí que puede cambiar, donde se incluyen los diferentes impuestos, tasas de aeropuertos, etc. La tasa de cada aeropuerto o impuesto aeroportuario es uno de los elementos más importantes de la parte variable del precio de un boleto de avión y, al mismo tiempo, es una tasa variable en sí misma porque igual se ve afectada por diferentes factores, aunque generalmente no de un día para otro. Pero, ¿qué factores afectan al impuesto aeroportuario? El impuesto aeroportuario puede dividirse en cinco pequeños impuestos o partes que afectan a cómo se calcula el precio. Estos cinco impuestos o partes que afectan al impuesto aeroportuario son los siguientes: 1 y 2. Impuesto QW o QX. Los impuestos QW y QX tienen que ver con el uso que el pasajero va a hacer de la terminal del aeropuerto. El impuesto QW se aplica a vuelos nacionales y el impuesto QX a vuelos internacionales. 3. Impuesto FR. El impuesto FR es el impuesto de aviación civil que recauda el Estado de cada país. Contribuye al funcionamiento y correcto desarrollo de la DGAC, la Dirección General de Aviación Civil de cada nación. 4. Impuesto XT. El impuesto XT es la tasa destinada a garantizar la seguridad de los pasajeros y el control de sus equipajes, entre otras cosas. 5. Impuesto IZ. El impuesto IZ es un impuesto solidario que afecta a los boletos de avión. El dinero que se recauda a través del impuesto IZ se destina al UNITAID y al GAVI, esto es, al Fondo Global para Pandemias y la Alianza para la Inmunización, respectivamente. Evolución del precio de un boleto de avión Otros factores La variación en el precio de los boletos de avión tiene nada o poco que ver con los elementos que integran la parte variable e invariable. La variación en el precio final de un boleto, cuando ya lo estás buscando por Internet, responde a otras cuestiones como la aerolínea con la que quieras volar, la fecha en la que vayas a hacerlo o la situación económica de tu país. 1. Que el sistema sepa que quieres ese vuelo (ordenadores e IPs) Muchas aerolíneas han desarrollados truquitos o trampas para conseguir que sus clientes paguen más por un mismo producto en función de cuánto lo quieran. Esto se ve muy claro con un ejemplo. Imagina que quieres volar de Madrid a Londres del 12 al 30 de agosto. Tú, en un intento de garantizarte el mejor precio, empiezas a mirar el precio de este boleto a diario desde un mismo ordenador, teléfono móvil o tablet y, normalmente, el precio en lugar de bajar sube. ¿Por qué? Bueno, el sistema o aerolínea está detectando a través de la IP de tu ordenador que tienes interés en ese vuelo y como tienes interés, ¡te sube el precio! ¿Hay alguna forma de evitar que la búsqueda de vuelos provoque un aumento de dinero en el cálculo del precio del vuelo? Sí. Una de las formas para evitar que el sistema se dé cuenta de que quieres un determinado vuelo es que utilices diferentes dispositivos para controlar o buscar vuelos (mira vuelos desde tus dispositivos, pero también desde los del trabajo, la biblioteca u otros familiares o amigos). Otra solución es que busques tantos vuelos que el sistema no sea capaz de entender cuál te interesa (¡porque te interesan todos!) y, por tanto, no pueda subir el precio de ese vuelo concreto que sí que te interesa de verdad. 2. La fecha en la que quieras volar También la fecha en la que quieras hacer un viaje afecta a cómo se calcula el precio de tu boleto de avión para dicho viaje. No cuesta lo mismo volar en un mes que en otro. De nuevo, esto se ve muy claro con un ejemplo. No cuesta lo mismo volar en Navidad que en febrero, es decir, el precio no es el mismo para volar cuando mucha gente está intentando comprar que cuando nadie quiere volar. Lo mismo ocurre con los días de la semana. El día de la semana en que quieras volar también influye en cómo se calcula el precio de un boleto de avión. Suele salir más barato volar de martes a jueves que de viernes a domingo. La razón para esta evolución de los precios de los boletos de avión es fácil de entender: oferta y demanda, no es necesario hacer ofertas en un momento en el que los pasajeros quieren volar sí o sí (Navidad, vacaciones de verano, fines de semana, etc.). De hecho, hasta les puedes subir el precio porque, probablemente, van a comprar sí o sí el boleto, aunque sepan que en otro momento del año o día de la semana ese mismo boleto cueste menos. Por lo general, las ofertas vienen cuando la demanda de viajes es menor (entre semana, meses de invierno, etc). En todo caso, a través de las ofertas las aerolíneas tratan de animar a los pasajeros a que se vayan de viaje en momentos diferentes para que su negocio sea rentable todos los meses del año. 3. La competencia entre aerolíneas En caso de que quieras volar a un destino muy popular, ¡enhorabuena! Esto generalmente significa que habrá más aerolíneas volando a ese destino y, por tanto, la competencia entre ellas será mayor. Por lo general, a mayor competencia entre aerolíneas, menores precios para los boletos de avión. La aparición de las aerolíneas de bajo coste y, con ellas, del incremento del número de asientos ha sido una buena noticia para los pasajeros porque han cambiado el mercado de la aviación. Ahora, el precio de volar es mucho más barato que antes. 4. El precio del combustible El precio del combustible también influye en cómo se calcula el precio de un boleto de avión. A mayor precio del combustible, mayor puede ser el incremento en el precio del vuelo. Normalmente la subida o caída en el precio del carburante no afecta de inmediato al precio de los boletos ya que, cuando las compañías aéreas compran combustible, lo hacen al por mayor. Al comprar carburante al por mayor, las aerolíneas pueden garantizar un precio fijo en sus boletos durante un tiempo determinado. Esto permite cierta estabilidad para las aerolíneas en momentos en que los precios del petróleo se disparan y, al mismo tiempo, conseguir ingresos extra cuando cae el precio del combustible. Normalmente, para el pasajero significa pocos sobresaltos. 5. El crecimiento económico general Por lo general, las tarifas aéreas están directamente relacionadas con la evolución económica del mercado en el que se encuentran. La aceleración o deceleración económica del mercado en el que se encuentran sus clientes influye directamente en la demanda de boletos de avión y, por tanto, en su oferta y demanda y en cómo se calcula el precio de estos boletos. A menor demanda, como consecuencia de una desaceleración económica, precios más bajos en los boletos de avión y viceversa. 6. Cambio en los impuestos Los impuestos de los que hablábamos al principio no son para siempre. Pueden variar dependiendo el país y del momento en el que se esté. Así, por ejemplo, de un año para otro puede cambiar el impuesto aeroportuario de un determinado aeropuerto o país y provocar una subida de precio. -- DINERO IMAGEN